Iñaki Sáez, la piedra angular
El fútbol es muchas veces injusto, en el campo y también fuera de él. Sobre todo con aquellas personas que realizan un trabajo fundamental, pero en la sombra, y su reconocimiento queda en la mayoría de los casos empañado por los que se encuentran bajo los focos mediáticos. José Ignacio Sáez Ruiz (Bilbao, 23 de abril de 1943), al que todos conocen como Iñaki Sáez, representa uno de estos casos. Seguramente sin su trabajo en las categorías inferiores de la selección española a lo largo de once años muchos de los jugadores que hicieron que España tocara el cielo en las Eurocopas de 2008 y 2012 y en el Mundial de Sufáfrica, quizá no habrían llegado hasta allí.
Los inicios de Iñaki Sáez en el mundo del fútbol están vinculados al Athletic de Bilbao, al que se incorporó con 19 años procedente del Barakaldo y en el que permaneció hasta su retirada. Jugaba como defensa y vistió la camiseta rojiblanca durante 12 temporadas, las mismas que estuvo en la élite del fútbol español. Prácticamente en todos sus años con los leones fue una pieza básica e incluso llegó a disputar la Copa de la UEFA. Ha disputado un total de 338 encuentros con el Athletic, que le convierten en el 29º jugador con más partidos de la historia del club bilbaíno, y ha marcado 8 goles. Además, tiene en su palmarés como futbolista dos Copas del Rey (1968-69, 1972-73).
Colgó las botas en 1973, con 30 años, e inició una exitosa carrera como entrenador. Su primer equipo fue el Bilbao Athletic, con el que logró un ascenso a Segunda División B en su primera campaña (76-77). Permaneció dos campañas más en el segundo equipo rojiblanco y en 1980 se hizo cargo del primer equipo. Conquistó una Copa y una Liga en su primer año al frente del banquillo de los leones.
Durante las siguientes temporadas intercaló idas y venidas entre el primer equipo y el filial, aunque sus regresos al primer equipo llegaban siempre a mitad de temporada, para sustituir a sus anteriores técnicos. Pero ello no le impidió ser una pieza clave en la consecución de títulos. En el curso 85.96, el combinado bilbaíno encadenó Liga, Copa y Copa de la Liga y , en la 90-91, sumó un nuevo doblete de Liga y Copa. Y con el Bilbao Athletic también logró dos ascensos a Segunda División en 1983 y 1989.
En la temporada 91-92 Iñaki Sáez fue destituido como técnico del primer equipo del Athletic de Bilbao y puso fin a 16 temporadas como preparador rojiblanco. Regresó a un banquillo dos años después para dirigir a la Unión Deportiva Las Palmas, que militaba en Segunda División B, y en la campaña 95-96 entrenó al Albacete en Primera División.
En 1996 inició la que sería su gran etapa como entrenador al incorporase a las categorías inferiores de la selección española para dirigir a los combinados sub 20 y sub 21. En 1998 logró el Campeonato de Europa sub 21; un año más tarde, la Copa del Mundo sub 20; y en 2000, una medalla de bronce en el Europeo sub 21 y la clasificación para los Juegos Olímpicos de Sídney 2000. En la ciudad australiana, Iñaki Sáez escribió una página triunfal en su carrera como seleccionador con la medalla plateada.
Bajo su tutela había despegado toda una saga de futbolistas con un porvenir muy brillente: Iker Casillas, Carles Puyol, Xavi Hernández, Albelda, Marchena, Tamudo y un largo etcétera, germen de esa selección que ocho años después se reconciliaría con su afición y le recompensaría años de sufrimiento y maldiciones de cuartos con tres títulos de oro y diamantes.
Pero tras ellos, muchos más futbolistas pasaron por las categorías inferiores de Iñaki Sáez. En la temporada 2001-02 también dirigió a la sub 19, aunque una de las recompensas a su trabajo en la base llegaría en el curso 02-03, cuando se puso por vez primera a los mandos de la selección absoluta, a la que dirigió entre 2002 y 2004. En ese período también logró un Europeo con la seleccción sub 19.
El año 2008 fue el último de Iñaki Sáez como técnico en la Selección española. Tras de sí dejó una alfombra de títulos, pero también de críticas, pues le tocó vivir los momentos de dudas y descofianza hacia el combinado nacional. Los frutos de su trabajo están ahí, triunfando en España y Europa y ganando nuevos títulos cada temporada, por lo que corresponde situar a Sáez en el lugar que se merece, como piedra angular de una generación irrepetible.
Los inicios de Iñaki Sáez en el mundo del fútbol están vinculados al Athletic de Bilbao, al que se incorporó con 19 años procedente del Barakaldo y en el que permaneció hasta su retirada. Jugaba como defensa y vistió la camiseta rojiblanca durante 12 temporadas, las mismas que estuvo en la élite del fútbol español. Prácticamente en todos sus años con los leones fue una pieza básica e incluso llegó a disputar la Copa de la UEFA. Ha disputado un total de 338 encuentros con el Athletic, que le convierten en el 29º jugador con más partidos de la historia del club bilbaíno, y ha marcado 8 goles. Además, tiene en su palmarés como futbolista dos Copas del Rey (1968-69, 1972-73).
Colgó las botas en 1973, con 30 años, e inició una exitosa carrera como entrenador. Su primer equipo fue el Bilbao Athletic, con el que logró un ascenso a Segunda División B en su primera campaña (76-77). Permaneció dos campañas más en el segundo equipo rojiblanco y en 1980 se hizo cargo del primer equipo. Conquistó una Copa y una Liga en su primer año al frente del banquillo de los leones.
Durante las siguientes temporadas intercaló idas y venidas entre el primer equipo y el filial, aunque sus regresos al primer equipo llegaban siempre a mitad de temporada, para sustituir a sus anteriores técnicos. Pero ello no le impidió ser una pieza clave en la consecución de títulos. En el curso 85.96, el combinado bilbaíno encadenó Liga, Copa y Copa de la Liga y , en la 90-91, sumó un nuevo doblete de Liga y Copa. Y con el Bilbao Athletic también logró dos ascensos a Segunda División en 1983 y 1989.
En la temporada 91-92 Iñaki Sáez fue destituido como técnico del primer equipo del Athletic de Bilbao y puso fin a 16 temporadas como preparador rojiblanco. Regresó a un banquillo dos años después para dirigir a la Unión Deportiva Las Palmas, que militaba en Segunda División B, y en la campaña 95-96 entrenó al Albacete en Primera División.
En 1996 inició la que sería su gran etapa como entrenador al incorporase a las categorías inferiores de la selección española para dirigir a los combinados sub 20 y sub 21. En 1998 logró el Campeonato de Europa sub 21; un año más tarde, la Copa del Mundo sub 20; y en 2000, una medalla de bronce en el Europeo sub 21 y la clasificación para los Juegos Olímpicos de Sídney 2000. En la ciudad australiana, Iñaki Sáez escribió una página triunfal en su carrera como seleccionador con la medalla plateada.
Bajo su tutela había despegado toda una saga de futbolistas con un porvenir muy brillente: Iker Casillas, Carles Puyol, Xavi Hernández, Albelda, Marchena, Tamudo y un largo etcétera, germen de esa selección que ocho años después se reconciliaría con su afición y le recompensaría años de sufrimiento y maldiciones de cuartos con tres títulos de oro y diamantes.
Pero tras ellos, muchos más futbolistas pasaron por las categorías inferiores de Iñaki Sáez. En la temporada 2001-02 también dirigió a la sub 19, aunque una de las recompensas a su trabajo en la base llegaría en el curso 02-03, cuando se puso por vez primera a los mandos de la selección absoluta, a la que dirigió entre 2002 y 2004. En ese período también logró un Europeo con la seleccción sub 19.
El año 2008 fue el último de Iñaki Sáez como técnico en la Selección española. Tras de sí dejó una alfombra de títulos, pero también de críticas, pues le tocó vivir los momentos de dudas y descofianza hacia el combinado nacional. Los frutos de su trabajo están ahí, triunfando en España y Europa y ganando nuevos títulos cada temporada, por lo que corresponde situar a Sáez en el lugar que se merece, como piedra angular de una generación irrepetible.